¿Aún guardas tu estrategia empresarial bajo llave?
Es difícil para las personas implementar una estrategia que no entienden. Comunicar las prioridades para la primera línea de acción (equipo de ventas) está estrechamente correlacionado con el rendimiento del negocio. Pero, a la inversa, creo que en un término medio, es donde se suele romper la estrategia.
He visto en varias multinacionales grandes ejecutivos que se resisten a detallar explícitamente cual es la estrategia, y la razón más común es el miedo a que dicha información llegue a sus competidores. Como consecuencia de esta acción, la organización se convierte en un ente de “mediocridad global” que es bueno para unas cosas generales, pero muy malo para todo lo individual.
La esencia de la estrategia es lo que tus clientes valoran de verdad y lo que tus competidores encuentran tremendas dificultades para copiar.
Pero, adentrémonos en el problema de la copia de la estrategia con ejemplos concretos:
La estrategia de firmas archiconocidas, se pueden encontrar en blogs, libros, casos de estudio, como por ejemplo Apple, Ikea, Nike….
Hay otros ejemplos, como Toyota que deja “entrar” en sus factorías a externos para compartir su estrategia. Después de 4 años de estudio de la estrategia abierta de Toyota, los observadores suelen confundir las herramientas y prácticas que se llevan a cabo en las propias factorías de Toyota, entonces, si estas empresas las comparten públicamente y nadie ha podido hacerlo, no será tan fácil copiar una estrategia.
En un mundo en movilidad, donde hay empresas globales diseminadas por la producción de información, llega un momento que la información no es difícil adquirirla, lo difícil de verdad es entender cual es la estrategia y cómo ponerla en práctica.
La estrategia de negocio es la elección de las empresas por competir en el mercado. Algunas de las decisiones son implícitas, y tienen que ir detalladas en un plan y sobre todo discutirlas en numerosas reuniones con el equipo de ventas. Pero hay muchas otras que no son nada implícitas en la decisión final y a menudo nada estructuradas ni consensuada estratégicamente sino que son enfocadas de proyecto en proyecto para el negocio.
La experiencia me dicta que cualquier presupuesto, grande o pequeño, envuelve elecciones que cuestan más o cuestan menos…… dinero, recursos, nuevos recursos y sobre todo tiempo!!.
En una gran empresa, la mayoría de las personas se centra en los problemas del corto plazo, y el agregado de estas decisiones determina cuales son las prioridades reales, oportunidades, miedos, y comportamientos de los valores de la empresa. Que conste que es perfectamente comprensible este tipo de acciones, pero hay una fuerte ignorancia en este aspecto del negocio y es propiciada por una falta de comunicación de arriba abajo.
No comunicar de forma abierta la estrategia dentro de la propia compañía incurre en problemas futuros y sobre todo los costes se disparan. Una estrategia “vaga” no puede ser probada en profundidad por el mercado y sobre todo con lo cambiante que es éste últimamente.
No subestimes el poder de las palabras, porque los negocios son un arte del rendimiento y no es lo mismo decir que hacer.
Muy acertado tu post. todavía hoy se guardan las estrategias bajo llave o dentro de despachos , y poco y mal comunicado llega a los verdaderos ejecutores de las mismas. Situación que ha perdido todo el sentido pues la velocidad que ha imprimido el factor tecnológico a los cambios en los modelos de negocio hace que secretismos o planes a 5 años hayan perdido parte de su sentido , sin actualizaciones constantes.
El cliente que es realmente el que debería percibir la estrategia en toda su esencia apenas le llegan migajas, pues paradojicamente los equipos de ventas y de atención al cliente son escasamente informados y formados del verdadero fin de sus acciones.
¿Porqué quienes tienes modelos abiertos son difícilmente copiables? Por lo que he observado son compañías que apuestan por las personas y el talento, y las acciones derivadas de estos grandes equipos son muy difíciles de copiar.
Gracias por compartir. Saludos,Pilar
¡Muchas gracias por opinar, Pilar!
Tienes toda la razón, quizá, poco a poco, los directivos españoles vayan modernizándose y adaptándose a la sociedad de la información.
Pilar, estoy totalmente de acuerdo con tu comentario!! Gracias.