“Para emprender hace falta una pizca de locura y mucho de sensatez”
Patricia Ramírez es, además de psicóloga deportiva de primer nivel y conferenciante, otras muchas cosas. Fue pieza fundamental en el último ascenso del Real Betis Balompié, donde dejó un grato recuerdo. Además trabaja con deportistas nacionales e internacionales en el deporte de alto rendimiento, tanto individual como colectivo. Pero además da charlas, imparte cursos y colabora en el programa de TVE “Para todos las 2”, divulgando uno los temas que más le apasionan: la psicología de la salud. Tiene publicado tres libros: “Autoayúdate, tu vida es lo que tú decides”, “Entrénate para la vida” y “¿Por qué ellos sueñan con ser futbolistas y ellas con princesas?”, todos editados por Espasa Libros.
Antes que nada Patricia. Libros, conferencias, charlas, talleres, colaboraciones en distintos medios de comunicación… cuéntanos tu secreto para gestionar el tiempo.
No hay ningún secreto. La cuestión es saber organizarse. Yo soy una persona muy cuadriculada e intento organizar todas mis tareas de manera que me cunda el tiempo. No se trata de trabajar 15 horas, sino de organización y establecer prioridades.
En su decálogo del buen vendedor habla de que “pasión, amor y pasión” es fundamental para un buen comercial. ¿Son cualidades que se cultivan o que son innatas a la persona?
La pasión está relacionada con el talento. Lo más adecuado es elegir algo que te apasione y a partir de ahí crecer y desarrollar el talento. Es mejor que a la inversa, porque la pasión no es fácil de cultivar.
¿Por qué cree que la figura del vendedor no está bien vista en España?
No creo que la figura del vendedor esté mal vista. Lo que está mal visto es la falta de profesionalidad. Un cliente espera de su comercial que sea honesto y claro y si no es así está fallando a la profesionalidad. Yo he tenido experiencias con vendedores que no han cerrado la operación conmigo porque no me han querido dar algo que no necesitaba. En ese caso se gana en credibilidad y es una muestra de profesionalidad. Ha perdido una venta pero ha ganado un cliente para toda la vida.
¿Es un sector aún por profesionalizar?
Todo está por profesionalizar. Siempre se puede pasar de lo bueno a lo excelente. Es cierto que no existe una formación reglada y quizás debería haber una formación de este tipo. Al fin y al cabo hay mucha gente que se dedica a vender. Un psicólogo, por ejemplo, también es un vendedor. Presta un servicio que el cliente compra. Hay, por tanto, una transacción. Todo el mundo vende algo.
Vamos al emprendimiento, término tan de moda y que parece ser la única forma posible para salir de esta crisis. ¿Qué cualidades son “innegociables” para emprender y qué es lo primero que debe tener claro una persona que apuesta por esta vía?
Hay que tener claro que cualquiera no puede emprender. Es necesario entrenarse y conocer las consecuencias que conlleva y por supuesto respetar a aquel que no quiera hacerlo.
En cuanto a la segunda pregunta, necesitas una buena idea que pueda convertirse en proyecto. Luego hacer un estudio de mercado, estudiar los pros y los contras, analizar el sector, generar contactos, medir el riesgo y sobre todo tener valentía para emprender y para equivocarse. Debe haber una buena mezcla entre una pizca de locura y un mucho de sensatez. Es fundamental calibrar los peligros y no arriesgar el patrimonio personal, pues en estos casos un fracaso se convierte en drama.
El carisma es una de las cualidades que en cualquier aspecto de la vida ayuda a abrir puertas. ¿Se trabaja o, como suele decirse, “viene de fábrica”?
Hay personas que nacen con más facilidad, pero es una cualidad que se puede desarrollar y que se cultiva.
El carisma es, por supuesto, uno de los rasgos que debe tener cualquier jefe de equipo. Pero ¿Cuáles son las principales características que se debe tener para liderar un equipo?
Para liderar un grupo es básico tener credibilidad y ser honesto. Más que un líder de equipo es un gestor de personas que debe querer el bien para su equipo. Además tiene que demostrar experiencia y saber hacer y sobre todo ser un buen motivador.
En su libro “Por qué ellos sueñan con ser futbolistas y ellas con princesas”, habla sobre las diferencia entre géneros. ¿Hay determinados puestos en el organigrama empresarial más idóneo para mujeres o para hombres?
No. Por supuesto que no. Es obvio que existen diferencias biológicas, por ejemplo, procesamos de forma distinta la información, pero esto nunca puede ser argumento para la desigualdad. Lo que tenemos que hacer es conocernos mejor, para entender el comportamiento de cada uno.
Para finalizar… escuchamos a diario en nuestras empresas y en nuestro entorno que hay que ser multitarea (como los Smartphones). Sin embargo la capacidad para concentrarnos y hacer un buen trabajo parece que va perdiendo importancia. ¿Cómo podemos casar ambos conceptos?
Yo estoy totalmente en contra de la multitarea. Si tenemos diez cosas que hacer, hay que hacer una, luego la otra y así hasta terminar, pero nunca querer hacerlas a la vez porque el resultado no es el esperado. No podemos procesar la información como un ordenador, nuestra mente no está preparada para eso.